8A: Que sea Ley

Yo estoy en contra del aborto. Pero... hay una realidad. Ni yo, ni mi cuerpo jamás van a tener que pensar en tomar esa decisión.

Actualmente en Argentina, un asesino cumple su condena y más o menos años, queda libre. Incluso, puede ser declarado inocente. Un violador, igual. Pero una mujer, por tomar la decisión de abortar, puede pagarlo con su vida. Es decir, que en este país, a un asesino y a un violador, tarde o temprano, se les da la libertad, y a una mujer, se la sanciona con pena de muerte.

Solo una mujer puede tomar la decisión de su cuerpo. Y si ha tomado la decisión de abortar, lo hará de manera clandestina o de manera legal. Si se quieren salvar vidas, luchemos para que quien tomó la decisión de hacerlo, podamos volver a verla al día siguiente con vida.

El hombre toma la decisión de abortar, yéndose y jamás es cuestionado. Simplemente, no estaba preparado y desaparece. La mujer, no puede hacerlo. Si ella decide "irse", su cuerpo se irá con ella.

Quien esté en contra de la Ley, es solo para tomar la decisión del cuerpo ajeno. No quieren salvar la vida de un "ser vivo", quieren que pague con la muerte a quien decidió que hacer con su vida.

"Si no lo querés, dalo en adopción", se suele escuchar.  Dos cosas a eso: En primer lugar, no existe la adopción directa en el país y dudo que alguna vez llegue a existir. Con lo cual, lo más cercano a eso es una adulteración de documentos, en el cual quienes elijan "adoptar", figurarán como padres biológicos, y no así como adoptantes, alterando así de manera ilegal, el Derecho a la Identidad. En segundo lugar (y más escalofriante), es que si yo secuestro a una mujer contra su voluntad por nueve meses, la hago parir y luego la "suelto", es exactamente lo mismo a lavarle la cabeza a una mujer que pretende abortar, que lo tenga todo el embarazo y luego lo regalo como objeto de colección, total solamente ella sabrá el proceso y los cambios que sufrirá y padecerá durante todo el proceso.

Por otra parte, se quiere conseguir que ese embarazo llegue a término, pero una vez que nazca el bebé, ya no interesa que será de su vida. Lo importante para quien está en contra, es solo aumentar la población, a costa de la vida ajena.

La ley de matrimonio igualitario, no te obliga a ser gay. La ley de divorcio, no te obliga a separarte. La despenalización del aborto, no te obliga a abortar. Te da el derecho a que si algún día es tu decisión de hacerlo, pueda ser seguro, legal y gratuito.

Si estás a favor de la legalización del aborto, luchá para que el miércoles 8 de agosto de 2018 sea Ley. Y si estás en contra, porque no entendiste que no se trata de abortar o no, sino que sea legal o clandestino, y tenes en tu cabeza una frase impuesta de "Salvemos las 2 Vidas", luchá para que si no podes salvar "dos", al menos salves UNA.